Los titulares del día

Hoy es de esos días en los que te apetece comentar los titulares más interesantes de la prensa. La elegida de hoy (y de siempre, por qué no decirlo) ha sido 20minutos.es. Ale, al lío.


Nadal hace su "69" en tierra

Qué incómodo, ¿no? Con la mala hostia que tiene la arena para introducirse en los sitios más insospechados. Pero bueno, si el chaval es feliz, pues adelante.


¿Qué nombre le ponemos a la hermana de Leonor?

Bueno, sí, lo que nos faltaba ya. Bastante que vamos a tener que pagarle sus gastos como para encima preocuparnos por bautizar a la niña. Que hagan algo útil ellos, para variar. Eso sí, ya que nos preguntan, vamos a decir nombres feos a mala leche. Ataulfa por ejemplo. O Ramona. O Eufrasia.

''No hablar inglés o no dormir siesta aumenta el riesgo de infarto"

Esta inquietante sentencia ha salido de los labios de José Abellán, catedrático de la UCAM. Yo aun tengo el susto en el cuerpo. Lo de la siesta lo veo normal. Todo el mundo sabe que la siesta es algo determinante para la salud física y mental. En España sobre todo, que tenemos siesta para exportar. Pero lo del inglés no se lo cree ni Dios. ¿O es que alguien se va a dormir después de comer preocupado por no saber inglés? Cama es bed, dormir es sleep y levantarse wake up. Son cuatro cosillas. Y siesta en inglés se dice siesta. Así que más fácil imposible.

Preparan un musical sobre el Dúo Dinámico

Horror, espanto y pavor. Que Dios nos pille confesados y con muda limpia. Aunque bueno, pensándolo bien, igual no es tan mala idea. Así podremos volver a disfrutar de sus grandes éxitos como ese tan bueno de quisiera ser la aurora boreal. O el otro de... Vamos, que pinta muy bien.


Detenido por agredir a un fotógrafo con un ''tupper''

Un titular ya de por sí sabroso, y nunca mejor dicho. La cosa mejora cuando lees, con gran impacto, que el agresor es el famoso y encasillado hasta la náusea actor Hugh Grant. Vaya, como se las gasta el galán. Sin profundizar en la noticia, se me ocurren unas preguntas. ¿De verdad era el "arma" que más a mano tenía? ¿Estaba relleno el tupper para inflingir más daño con filetes empanados? Si estuviera lleno lleno de arroz, ¿se habría considerado arma blanca? Valium, Hugh.


El jefe de las tropas de EEUU en Irak cree que la situación empeorará más

¿Más incluso? Hombre, es posible ciertamente. Puede que mueran más personas al día, que haya más coches bomba, más atentados. ¿Pero qué más da? Lo importante es que ahora viven en democracia. Y mueren en democracia.


Y esto es todo por hoy. Mañana podría ser mucho peor. Saludos desde La Taladradora.

El dato del día

En Estados Unidos, uno de cada cinco habitantes posee un arma de fuego atendiendo a razones de uso y "seguridad personal". En España, esa proporción se ve reducida a una de cada cinco mil personas.

Saludos. And God bless America. Falta les hace, desde luego.

Ir de compras sin morir en el intento

Había sido mi cumpleaños hace poco. Una putada, qué le vamos a hacer. No obstante, tenía algo de dinero ahorrado y me disponía a ir de compras. Quizá algo de ropa, sí. ¿Por qué no? Total, tengo los vaqueros hechos una puta mierda y los otros son más viejos que mear palante. Y quizá alguna camiseta de esas que sólo te parecen graciosas a tí. O de esas que compras pensando que vas a ser el más original del lugar para descubrir horrorizado tres días después que hay cinco personas más originales (y rápidas sobre todo) que tú. Lástima. No obstante, sí, decidido. Vamos de compras.

Hasta aquí todo bien. La decisión de ir de compras es sencilla de tomar. De hecho, es el pasatiempo preferido de la sociedad actual. Los domingueros ya no van al campo. Van a Alcampo. Que no es lo mismo, aunque pueda parecerlo. Por cierto, aunque no viene al caso, ¿por qué en el campo nos saludamos todo el mundo como si nos conociéramos de toda la vida? ¿El aire puro nos hace educados? Curioso. Pero bueno, vamos al grano con un detalle importante: ir de compras no significa comprar. Ni mucho menos. Ir de compras significa mirar mil tiendas atestadas de gente tan consumista como tú, aunque sea sólo por curiosidad.

Otro que no falta a la cita es Murphy. Sí, el de la ley esa tan molesta. Pongámonos en situación. Llegas a la tienda con prisa, o quizá simplemente hasta los cojones de dos horas de dar vueltas por el maldito centro comercial y con los pies pidiendo descanso urgentemente. En ese caso, nadie te hará ni puñetero caso, valga la redundancia. Y en el caso de que haya alguien allí, te remitirá a un ''compañero''. La frase mágica por excelencia es: ''díselo a mi compañero''. Joder, ¿tu eres mudo o qué? Lo peor de todo es cuando miras a tu alrededor para descubrir que no hay ningún "compañero" de esos. Ya puedes mirar entre los pantalones, en los bolsillos de las chaquetas o detrás del mostrador, que no hay nadie. Habrá ido a atender a alguien menos pringao que tú, con toda probabilidad.

Pero el caso contrario no se queda atrás. Y es más incómodo si cabe. El mayor error después de entrar en una tienda llena es... entrar en una tienda vacía. En cuestión de segundos ya tienes a un dependiente pendiente de tí. En este caso la frase mágica es: "¿te puedo ayudar?" Que te entran ganas de decirle: ''sí tío, pírate y déjame ver tranquilamente las cosas, no me presiones''. O eso o pedirle un café con pasas. Pero como no viene al caso, pues pasas. Al segundo intento del dependiente pendiente ya te rindes y le dices a lo que vienes. Quiero unos pantalones. Pero enséñame los baratos, cabrón. Y efectivamente, te lleva a la sección de los que valen 90 euros. Entonces empieza a hablarte de usted con unos respetos casi monárquicos, te dice lo bien que te quedaría (incluso llega a comentar algo de tu culo, lo cual enciende las alarmas) y, como no, lo buena marca que es. En cuanto se de la vuelta para enseñarte el de 120 euros, hay que aprovechar para salir echando ostias de allí antes de que te proponga matrimonio. Que eso si que sale carísimo.

Y esto es todo de momento. No me queda más que recomendar encarecidamente no salir de compras de este tipo si no es estrictamente necesario. Puede ser realmente peligroso.

Saludos.

PD: Me dicen que se hace algo corto y me proporcionan útiles sugerencias para una posible segunda parte. Lo consultaré con la almohada.

De un "tiempo Fenómeno" y un producto

Ya va haciendo calorcito. Toquemos madera. Y con el buen tiempo se va acercando, inexorablemente, el veranito. El verano es esa etapa del año en la que las neuronas están tan reblandecidas que son capaces de asimilar cualquier cosa. Por ejemplo, chiringuitos de mierda, 40 grados a la sombra o botellas de agua a 3 euros, que quitaran la sed pero te dan una mala hostia que no veas. No compensa a veces, no. Y claro, hay quien se aprovecha de esta circunstancia dando lugar a (redoble de tambores), ¡la canción del verano! Que no entiendo por qué se habla en singular de estas creaciones si en realidad hay que aguantar muchas. Ójala fuera sólo una.

El caso es que como decía, ya hay quien se ha puesto a engrasar la maquinaria de la caspa veraniega. Vamos con una de estas personas sin escrúpulos y con una oreja en frente de la otra. El criminal/artista en cuestión es El Fenómeno, y la canción se titula ''Quiero ser un producto''. Si Risto levantara la cabeza...



"Quiero, quiero ser un producto,
quiero comerme el mundo,
quiero ser muy famoso y triunfar"

Al menos no oculta sus oscuras intenciones. Y cumple todos los requisitos para ser canción del verano. Es cutre, pegadiza y su calidad musical es discutible. Así que, todos alerta, que ha llegado una de las amenazas del verano. Éxito rutilante en potencia. Aunque hay que reconocer que el momento ''Bohemian Rhapshody" con cabra incluída es impagable. Lo dicho. Todos a sus puestos, y hasta la próxima.

PD: Sí, se que llevo dos entradas seguidas con vídeoclips de música freak. Pero, ¿y lo que mola?

Ya estamos de vuelta

Diez días despues de la catástrofe. Y mira por donde, a mi ordenador no le pasaba nada grave. Ni ventilador, ni fuente ni na de na. Era el Windows, que estaba hecho una puta mierda por lo visto. Lo importante es que La Taladradora ha resucitado por fin, y parece que tiene aún ganas de hacer ruido.

Y hablando de ruido, hoy vamos a ver un videoclip que durante estos días en el exilio me ha sobrecogido hasta límites insospechados. Y es que a día de hoy, cuando piensas que ya no se puede hacer nada peor musicalmente hablando, un nuevo bodrio se encarga de darte una hostia y devolverte a la realidad. Sí, los yonkis se me han adelantado (con mi PC en plenas facultades otro gallo habría cantado), pero esto no hay que perdérselo. El que no lo haya visto, que no dude en hacerlo. Tatagolosa y su gran temazo, ya un clásico atemporal, obra de culto donde las haya, Micromanía:

Que letra por Dios, que calidad. Que riqueza musical. Es de esas pocas canciones que llegan al corazón. Como diría el gran Wyoming, ''te tienes que reír". Por no llorar.

Pues eso, que la cosa parece que vuelve a la normalidad. Seguiremos taladrando, si nos dejan.

Vacaciones forzadas en La Taladradora

Buenas tardes. La taladradora está averiada. O bueno, mi PC para ser más exactos y menos metafóricos. Ha tenido los santos cojones de fallecer en Semana Santa, cuando no hay ningún sitio al que llevar al enfermo para que le revisen los circuitos. Con un par, sí señor. Así que, forzadamente, la taladradora y yo nos vamos a tomar unas vacaciones que, por raro que pueda parecer, espero que sean lo más cortas posible. Estaremos por aquí cuanto antes con ideas nuevas (o no) y más cosillas interesantes (o tampoco).

Saludos.

PD: No descarto escribir alguna entrada desde el exilio. Estén atentos a sus pantallas.